Los niños siguen creyendo en los Reyes Magos y en Santa Claus
La evolución de la sociedad trae consigo nuevos juguetes que se adaptan cada vez más a la generación Z, informaron.
Muñecas, carritos, videojuegos y juegos de mesa son algunas de las peticiones que los pequeños le hacen tanto a Santa como a los Reyes Magos en Navidad. Su inocencia es demostrada en sus actos, ya que escriben una carta con la lista de juegos que desean y la entregan a sus padres, confiados de que el 6 de enero los Reyes Magos desembarcarán de sus camellos y dejarán los regalos debajo del árbol.
De forma ingenua los infantes colocan vasos de agua y algo dulce en la mesa para Melchor, Gaspar y Baltazar y también ramas de hierbabuena para que los camellos se alimenten.
Otros creen que el 25 de diciembre Santa Claus pasará por sus casas en el trineo y dejará los regalos solicitados debajo del árbol, por lo que dejan un vaso de leche y galletas para que se alimente al llegar.
Estas son algunas de las costumbres que los adultos transmiten a los pequeños para la época navideña. Los padres y/o tutores son los responsables de que los niños mantengan la fe en estos personajes hasta cierta edad, ya que luego maduran y dejan atrás el velo de la inocencia.
Por otro lado está la Vieja Belén, la cual, según el sociólogo Carlos Andújar, “es un recurso de los sectores populares para justificar la desigualdad social que acompaña la distribución de los regalos”.
Andújar también planteó que estas tres costumbres vienen de España. Sin embargo, antes la práctica de los Reyes Magos era más predominante que la del recibimiento de los regalos de Santa Claus. “Es indudable que esta tradición de los Reyes Magos está relacionada con el nacimiento de Jesús, pero hoy su fragilidad es parte de la influencia externa de Santa Claus, que es la expresión de la migración y la imposición de modelos foráneos en nuestra sociedad”, explicó.
Diario Libre realizó una encuesta a 20 personas vía web y los encuestados contaron sus experiencias en Navidad con niños cercanos, ya sean hijos, hermanos, sobrinos, entre otras categorías. Los resultados arrojaron que un 75% de la muestra afirmó que su niño cree en los Reyes Magos y un 60% en Santa Claus.
Del mismo modo, más del 50% de los encuestados confirmó que aún prevalece la tradición de esperar regalos de parte de Santa o de los Reyes Magos. “Es una tradición que nosotros como padres les inculcaremos a nuestros niños como nos inculcaron a nosotros los adultos”, opinó una de las encuestadas.
El micrófono de Barbie pone a las niñas a bailar y cantar sus canciones infantiles. ( )
Otros dijeron que los niños podrían perder la ilusión por familiares y amigos mientras que los demás expresaron que muchos niños afirman no creer, pero espían en las noches para ver si Santa o los Reyes Magos llegan a casa.
¿Por qué Anita quiere ese juguete?
Odalis Romero, subgerente de una de las sucursales de El Mundo del Juguete, explicó que la televisión empuja a los niños a pedir juegos en específico. “El telecable traza las pautas: Los muñequitos principalmente. Todas esas tendencias las van creando las mega industrias y nosotros aquí lo sentimos”, dijo.
Los que tienen series establecidas en los canales, así como las películas de superhéroes y animadas son las principales motivadoras de los niños al pedir sus juguetes. A su vez, Romero aseguró que cada vez que sale una nueva película, se da una movilización en el público infantil y estos comienzan a motivar a los padres a la compra.
Esta es la razón por la cual Anita quiere esa muñeca: ve los anuncios en la televisión todos los días y, además, es su personaje preferido de la serie y de la película.
Entre los juguetes en tendencia, actualmente se desatacan las muñecas LOL para las niñas y los drones y Transformers para los niños.
Tendencias tecnológicas
No solo la televisión y las películas influyen en las peticiones de Navidad, sino que también lo hacen las tendencias tecnológicas. La necesidad de estar conectados y a la vanguardia de nuevas innovaciones, provoca que algunos niños pidan videojuegos, celulares y computadoras en lugar de los juguetes tradicionales. “Los niños están en el tema de los drones”, agregó Cristian Alcántara, subgerente de Juguetón.
Esto dependerá de la edad del niño, ya que una de las compradoras de la tienda relató que uno de sus hijos pidió de reyes juegos de mesa y, además, un iphone Watch y un celular, mientras que el más pequeño prefirió unos carritos.
La tecnología no solo ha cambiado las peticiones de los niños, sino también los métodos de ventas de las jugueterías. “Antes venía más gente”, opinó Ivelisse Vásquez, supervisora de una sucursal de La Novia de Villa, pero explicó que ahora se llevan a cabo las compras vía web, las cuales cambiaron la costumbre de sus clientes de ir a la juguetería desde temprano.
¿Qué hacen las jugueterías para mantenerse en la vanguardia?
Una de las principales acciones por parte de las empresas es mantenerse aliadas a los programas de televisión que consumen los niños. “Nosotros tratamos de tener siempre a mano todos los juguetes de línea, los juguetes de línea son lo más novedoso, lo que está en el canal de cable para niños, y por eso la gente cada año nos visita más”, detalló el subgerente de Juguetón.
Por su parte, el subgerente del Mundo del Juguete hizo énfasis en la importancia del nivel educativo de los niños y como este aumenta a medida que pasan los años. “Los niños de ahora te piden tecnología, te piden ciencias, algún juguete que los motive a ellos, sea de química, etc. La sociedad que se va empoderando y va estudiando va exigiendo un poquito más y nosotros tenemos que responder a eso”, profundizó.
A pesar de que La Novia de Villa no sea visitada con la misma frecuencia de antes, han innovado en las ventas en línea y, según confirmó su supervisora, han tenido buenos resultados. “Todo es muy tecnológico. Aquí se hizo una oferta por la web y se vendió”, explicó.
Los días más concurridos de las jugueterías de Santo Domingo acontecen desde el 22 al 25 de diciembre y del 3 al 6 de enero, aunque diariamente los padres se pasean por las jugueterías, observan y analizan los precios y funciones de aquellos objetos que pronto formarán parte de la infancia de sus hijos.
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