República Dominicana. –El Instituto Nacional de Protección de los Derechos del Consumidor (Pro Consumidor), informó que ha suspendido 35 comercios dedicados a la venta de alimentos en el primer trimestre del año por insalubridad y presencias de plagas, irregularidades que se constituyen en la Ley 358-05 como violaciones graves que ponen en riesgo a la salud de los consumidores. En San Cristóbal se cerró el Pica Pollo San Cristóbal, Panadería y Repostería Amater y Panadería la Cristiana del Negrito, sumando tres en su totalidad.
Anina Del Castillo, titular de la entidad, indicó que, de enero a marzo de 2019, Pro Consumidor ha realizado operativos de inspección en el Distrito Nacional, el Gran Santo Domingo, Santiago de los Caballeros, La Vega y San Cristóbal, encontrando establecimientos como cafeterías, panaderías, colmados y restaurantes en condiciones no aptas para operar.
La mayor cantidad de cierres se produjo en el Distrito Nacional con un total de 26 comercios clausurados, de los cuales se destacan: Colmado Las Flores, Súper Colmado Monstruo Verde, Colmado Yessenia, Colmado González, Colmado Sánchez, Colmado Nuevo Gavilán, Colmado Dume, Colmado Bomba Súper fría, Colmado Andújar, Colmado Raquel, Colmado Chantal, Colmado Yimi, Colmado Cafetería Francis, Súper Colmado Rosa, Súper Colmado Brayan, Súper Colmado Santo y Colmado Chabelly.
También fueron cerrados el Pica Pollo Villa Agrícola, Pica Pollo Full, Pica Pollo Campestre, La Casita de Raquel, D´Pamela Restaurante, Mini Market Medrano II, Cafetería Comedor El Sol, Bodega Restaurante Rey II y Bodega Sara.
En las provincias de Santiago y la Vega fueron suspendidos de sus operaciones seis comercios: Pica Pollo Sabroso, El Menú de Doña luz, Cafetería Punto Deli, Colmado Jhoan, Provisiones de la Cruz, Distribuidora Babán.
Hallazgos
Las inspecciones realizadas evidenciaron la falta de instalaciones sanitarias, salubres y seguras, la presencia de plagas y cucarachas, alimentos preparados al descubierto, ausencia de un control de fumigación.
Asimismo, se encontró una incorrecta manipulación y conservación de los alimentos y empleados con indumentaria inadecuada, faltas que penaliza la Ley 358-05 de Protección a los Derechos del Consumidor.
“Estas irregularidades producen riesgos y daños a la salud de la población, por lo que la entidad tiene la potestad de cerrar sus instalaciones y suspender sus servicios por no reunir las condiciones adecuadas y no cumplir con el llamado de ejercer el programa de buenas prácticas comerciales, el cual Pro Consumidor pone a disposición de los proveedores a nivel nacional, gratuitamente”, subrayó Del Castillo.
Los cierres no son definitivos
Pro Consumidor indicó que los cierres son temporales y los establecimientos pueden ser reabiertos si corrigen sus defectos y cumplen con los requisitos exigidos.
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